Y aquí estamos...

Cuentos fantásticos, tal vez - más adelante - capítulos de una novela, poesías...
En fin, todo lo que pueda llevarnos a un mundo en el que la rutina no existe... y la realidad tampoco.

lunes, 10 de enero de 2011

Muertos

Me levanto. Como siempre, como todos los días de mi rutinaria y paupérrima vida, me encuentro pidiendo en la calle, intentando ganar algunas monedas para comprarme mi cajita de sueños perdidos. Cansado, me siento en el cordón de la vereda.
De pronto, escucho un ruido intenso y prolongado. Un cortejo fúnebre. “Genial – pienso –, ahora voy a poder sacar algo más. Nada mejor que la gente triste.”
Me acerco a algunos que acompañan caminando a los autos lujosos. “Una limosna, señor”. Nada. “¿Una monedita, doña?” Nada. A un joven: “Pibe, me das una moneda?” Menos. Muecas de asco es todo lo que recibo.
Una mano me arranca del montón. Una gorra y un bastón me miran y me golpean.
“¡Basta!” grito, desesperado. “Él está muerto. ¡Y yo, vivo!”
Duermo en una cárcel. No hay dudas. La ciudad de la furia pertenece a los muertos.

2 comentarios:

Si leés y no comentás, vas a ver cómo esa bic que tenés en tu mano levanta vuelo y automáticamente se clava en tu ojo derecho.